El matrimonio es un invento y diseño de Dios y es la pieza fundamental del bienestar de la sociedad.
La familia surge de un matrimonio entre un hombre y una mujer. De ahí el nombre de NUESTRA serie “TU y YO”.
En esta serie, 17 parejas renovaron sus votos, se hicieron promesas mutuas… y esas palabras quedaron grabadas ante Dios. Con ellas, ya son 50 parejas de quienes yo he sido testigo de esta renovación de votos.
Muchas generaciones a futuro están bendecidas detrás del amor de sus padres hoy. Muchos hijos duermen tranquilos y confiados al ver a sus padres afirmar y confirmar sus votos matrimoniales.
El amor a los hijos se expresa amando a tu pareja.
¿Quieres hacer sentir a tus hijos amados? AMA A TU PAREJA ¡y ellos se sentirán amados!
Las historias de amor sí tienen un feliz final; de hecho, el matrimonio fue planeado para la felicidad del hombre.
¿Por qué no volvemos al principio? En el principio Dios creo «al hombre a Su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó”.
Y desde el principio Dios nos dio el MANUAL del éxito matrimonial: Su Palabra; la Biblia.
Por ejemplo, en Efesios 5 y en Colosenses 3 (E5C3) puedes ver los principios de unidad y de amor que Dios puso para que tú y tu pareja fueran felices hasta el final.
El mundo es testigo que desde el principio sí son normales y sí son posibles: la felicidad, la armonía, la paz familiar, la comprensión, el perdón y el apoyo mutuo incondicional y sin egoísmos.
Sólo en Cristo es posible.
