El chicle puedo decir que alivia las náuseas y es útil para dejar de fumar; tiene efecto de saciedad, ayudando a las dietas.
Pero no le faltan inconvenientes; la mayoría derivados no tanto del producto en sí mismo, sino en lo que viene después: lo que se hace con él una vez se termina.
Un CHICLE en realidad no tiene ningún propósito imprescindible, mas bien, puede deteriorar los dientes y genera contaminación urbana que cuesta millones al erario público.
Una RELIGIÓN es como los CHICLES. No aporta ningún nutrimento. Parece que estas comiendo, pero no comes nada. Tiene sólo “sabor” aparente, pero es superficial; y al final sólo empaña la verdad de una vida plena con Dios.
¡Una RELACIÓN personal con Dios es un BANQUETE continuo que nunca acaba!
Así como los chicles, una religión pierde su sabor eventualmente. RELIGION = CHICLES.
En este video toco este tema que me parece super interesante, ¿Tú que opinas?